TÉ LIMÓN CHIAPANECO

Edición: Patricia Mérida.     

La producción del te limón en Chiapas se ubica en la región Centro, en el municipio de Cintalapa; ahí los productores han implementado este zacate para uso industrial, ya que a través de la deshidratación de este producto se puede obtener el aceite esencial que es la materia prima para realizar derivados como: shampoo para el cabello, jabón, lavaplatos, aromatizantes, entre otros.

La estructuración de este sistema-producto, se inició con la unión de pequeños productores de zonas marginadas del sureste de México, quienes con miras de obtener mejores ingresos han establecido parcelas de té de limón orgánico en la localidad de Joaquines del municipio de Cintalapa. Esta producción logró su certificación orgánica en un 100 por ciento con la empresa Certificadora Mexicana de Productos y Procesos Ecológicos (CERTIMEX), cabe destacar que ya se encuentran también establecidas parcelas de este cultivo en el municipio de Ocosingo, en la zona Selva.

Actualmente, los productores trabajan de manera conjunta con el gobierno estatal, a través de la Secretaría del Campo para obtener la marca y el código de barras que les permita introducir su producto en tiendas departamentales como Chedrahui, Bodega Aurrera y Wallmart.

Chiapas a nivel nacional ha sido la única entidad que se ha organizado para constituir el sistema producto del te de limón desde el 2009, y de esta manera poder estructurar todos los eslabones de la cadena productiva que coadyuve a organizarse y conquistar otras fronteras de comercialización que brinde a los productores una alternativa de producción rural, además de la participación en el mercado con un precio justo para el productor, comercializador e industrializador.

Hoy, el té limón es un producto que tiene un potencial de exportación, la entidad ya inició envíos a Alemania desde hace tres años. Se realizan estudios de mercado para exportarlo a otros países y mantener una lista de clientes potenciales. Los requerimientos para poder exportar este producto son rigurosos ya que se trata de evitar su contaminación y garantizar su aroma y sabor, por ello se debe invertir en la calidad para obtener una ventana más amplia hacia el mercado internacional; ya que el té de limón es un producto innovador que significa una alternativa más para la economía de la entidad.

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