Edición: Patricia Mérida.
Se trata de una especie vegetal endémica de México, en
especial de la selva mexicana de Chiapas, es una flor llamada Lacandonia
schismatica.
Fue descubierta en 1985 en la Selva Lacandona por el biólogo
mexicano Esteban Martínez y en 1987 propuesta como una nueva familia ante el
Missouri Botanical Garden como Lacandoniaceae (orden Triuridales). En 1988 se
acepta la existencia de esta nueva familia de México y en 1989 se publica
oficialmente al mundo científico.
Es blanca, casi transparente, y no tiene clorofila. Parece
un hongo pero es una flor. Mide menos de dos centímetros, vive escondida entre
la hojarasca, cubierta por la exuberancia de grandes árboles que la alejan del
sol. Carece de pigmentos que sinteticen azúcares para alimentarse a sí misma y
por ello vive en simbiosis con un hongo microscópico que habita dentro de ella, el cual degrada compuestos carbonados para alimentarla. Es una planta heterotrófica, es decir, depende de otros para vivir. En esa asociación también participa un árbol, bajo el cual vive la pequeña planta en la selva.
La diferencia fundamental entre Lacandonia schismatica y las
aproximadamente otras 250 mil especies de flores es la relación espacial que
presentan sus órganos reproductores, cuyas flores poseen estambres en el centro
y están rodeados por los carpelos. Exactamente al revés de todas las demás, en
las que los estambres masculinos rodean a los carpelos femeninos.
Otra singularidad de Lacandonia schismatica es que sus
flores son hermafroditas y se trata de una especie cleistógama, es decir, es
fertilizada antes de que la flor se abra, por lo que siempre se autofecunda. En
consecuencia, la variabilidad de las poblaciones es altamente reducida. De esta
manera, el traslado de los genes de la población está limitado sólo a la
dispersión de semillas.
Las semillas de Lacandonia schismatica poseen una gran
cantidad de reservas que hacen plausible esta hipótesis, pues esto podría
indicar un proceso de dispersión eficaz con altas reservas para el embrión; sin
embargo la manera en que las semillas se dispersan aún permanece desconocida.
Además, no se ha observado ninguna asociación con insectos u otros posibles
dispersores, y dado que los granos de polen germinan dentro de la antera, los
polinizadores no son necesarios.
Aunque no se ha visto la germinación de las semillas, se han
encontrado plantas solitarias de Lacandonia schismatica que no forman rizomas,
lo cual aumenta la probabilidad de que estas plantas sean producto de la
dispersión y germinación de las semillas.
El área de distribución para Lacandonia schismatica parece
estar asociada con un lago ancestral que existió durante la última glaciación,
durante el periodo Cuaternario en Mesoamérica, hace unos 5 millones de años, la
temperatura de tierras bajas era 6-8°C menor de lo que es actualmente.
En dicha glaciación las poblaciones ancestrales de las
triuridas mexicanas donde la mutación homeótica se esparció, L. schismatica
pudo quedar aislada de sus ancestros después del retroceso de los hielos.
Entonces, Lacandonia schismatica puede ser un relicto de una población
ancestral de amplia distribución.
El estudio de Lacandonia schismatica está dando a los
científicos información sobre procesos evolutivos que han estado sucediendo
durante millones de años en especies vegetales y animales. Estos procesos han
dado origen a nuevos grupos de organismos que hoy nos parecen familiares, pero
que no sabemos cómo se formaron.
Así que esta pequeña flor representa una
innovación evolutiva, un ejemplo del cambio entre una estructura y otra. Su
estudio genético podría revelar en dónde se producen los nuevos diseños de las
estructuras florísticas y que genes están asociados a esta función.
1 comentarios:
ES UNA HERMOSA FLOR QUE PARECE DE CRISTAL Y ENDEMICA DE LA REGIÓN DE CHIAPAS Y DEBE PROTEGERSE DE LA EXTINSIÓN POR SER PARTE DE LOS ECOSISTEMAS Y LA ECOLOGÍA DE LA REGIÓN
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